La lana y su proceso para un colchón

Los colchoneros, siempre han tenido la lana como su mejor artículo de relleno para colchones.  Antiguamente, todos los colchones eran de lana de oveja, para poder disfrutar de este tan noble material, hay que pasar por un proceso largo y un poco complicado.

Las ovejas a finales de primavera, hay que esquilarlas, con el fin de que las ovejas estén más frescas y no tengan que llevar estos vellones tan cargados durante el verano, este proceso, es un beneficio muy grande para el animal  Una vez recogida la lana, se empaquetan y se llevan a los lavaderos industriales, en España ya solo queda uno.

Lana sucia esperando / Dirty wool waiting Foto: Luisa Cardenete

Lana lavándose / Wool being washed Foto: Luisa Cardenete

*imágenes de https://laneando.wordpress.com/tag/lavadero-de-lana/

El lavadero de lanas está en Béjar y se trata de la empresa Manufacturas S.A.

Una vez lavada la lana, hay que tener en cuenta que ha perdido el 40% de su peso en bruto, debido a que el resto era suciedad, también se aprovechada la lanolina para usos cosméticos, una vez pasado este proceso, ya se puede trabajar para la colchonería.


Se pueden hacer napas para los acolchados o para las partes inferiores o superiores del colchón, esto dependerá del propio colchonero

La lana que la destinamos para el colchón, aunque venga lavada, yo suelo cardarla para quitarle el posible polvo que pueda tener.  El cardado colchonero es distinto al cardado industrial. Yo utilizo una máquina de mediados de los 70 que es estupenda.

Luego una vez cardada, esta lana ya está lista para poderla poner en el colchón.  Los nuevos colchones que voy a sacar próximamente llevarán lana de oveja en cantidad.

Nuestros colchones, la lana no se medirá en gramos, se medirá en kilos.

Ya os iré mostrando en este blog mis avances en este tema.  El estilo de colchón que estoy estudiando es el de estilo británico.  Ahora ya tenemos el modelo Dublín, el cual tiene los muelles ensacados y viscoelástica, con  las costuras punto a punto en la platabanda del colchón, pero aún voy a ir mas allá.

 

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